Dice la prensa:

Un fraile de 73 años cuida en solitario del aislado monasterio de la Peña de FranciaEl acceso por carretera al Santuario mariano a mayor altura del mundo, a sus 1.723 metros, ha estado cortado durante una semana12/02/2009
El padre Ángel, en la Peña de Francia / FOTO: EFEEl padre Ángel, fraile dominico de 73 años, sufre el duro invierno en el Santuario de la Virgen de la Peña de Francia, donde vive aislado a 1.723 metros de altitud y recibe a los peregrinos que coronan el segundo punto más alto de la provincia salmantina. De hecho, el acceso por carretera a la peña ha estado cortado durante una semana y hoy precisamente se ha vuelto a abrir.En una entrevista concedida a Efe, Ángel Pérez explica que "tal es la devoción de la gente, que el pasado domingo, con una nevada espectacular, subieron hasta el santuario un grupo de ciclistas de alta montaña, sólo por devoción". El dominico sobrevive gracias al aprovisionamiento del que dispone, "aunque en estos últimos días", en los que ha estado doce "totalmente aislado", casi le "pilla el toro, ya que el temporal vino casi sin avisar".El Santuario de la Virgen de la Peña de Francia ha sido lugar de referencia para la peregrinación mariana desde 1437, cuando se instalaron medio centenar de frailes dominicos que permanecieron en el santuario, "aunque entre 1835 y 1900, debido a la desamortización de Mendizábal, nos echaron". Desde el lugar se divisan las provincias de Ávila, Salamanca y Cáceres, y en su interior se custodia la Virgen de la Peña de Francia, también conocida como la Virgen Morena, por el color de su cara, descubierta por el francés Simón Vela en el año 1434 en una cueva próxima a las inmediaciones del Santuario, levantado tres años más tarde por los dominicos.Sobre su soledad, el padre Ángel asegura que "todo esto es como un reto, un desafío, donde sufres la nieve, el hielo, las intensas nieblas y las ventiscas pero, aún así, yo estoy aquí para recibir a la gente, para escuchar sus testimonios de vida. No sólo estoy aquí para predicar".El fraile no está del todo aislado ya que tiene conexión a internet, gracias a un hombre que le hizo la instalación gratis para recibir la señal vía satélite. Este fraile dominico, natural del municipio salmantino de Aldehuela de la Bóveda y que lleva instalado diez años en este santuario desde que regresara de Perú, sueña con quedarse para siempre en este enclave, único por el lugar y la gente que sube.Reconoce que "sería bonito" ver cumplido ese deseo, aunque su reto inmediato es "ver si pasa este invierno", ya que "va mayor".En estos días, la nieve lo cubre todo e incluso ha invadido la capilla de San Andrés, contigua al santuario, hasta el que suben en peregrinación muchos devotos de toda España, de Portugal, de Francia y también de Filipinas e Indonesia. "Viene gente de estos dos países ya que los primeros frailes que se instalaron en el santuario fueron de misioneros a Filipinas y a indonesia", aclara."La peregrinación de estas personas tiene más mérito aún, ya que son personas muy perseguidas en países musulmanes, que se juegan la vida por su fe", según refiere el padre Ángel. En la provincia filipina de Nueva Cáceres los dominicos crearon un santuario al que le dieron el nombre de Virgen de la Peña de Francia y que, en la actualidad, es punto de referencia para los dominicos.Fecha: 12 de febrero de 2009Autor: Salamanca24Horas.D